D.M.: Hubo una temporada donde se consigue la clasificación para la UEFA, se gana a Madrid y Barcelona en el Benito Villamarín y se estuvo una jornada líder. ¿Cómo definirías aquel curso?
J.: Para mí fue espectacular, a nivel personal y sobre todo también a nivel global. El equipo venía de Segunda División y en el primer año estuvo luchando hasta última hora por meterse en la Champions, se llevó muchas jornadas de líder, sobre todo a principio de temporada, ganamos aquí con solvencia a Madrid y Barcelona, peleábamos contra todos los equipos, mantuvimos muchísimos partidos la portería a cero. Yo incluso tuve un récord personal desde que debuté en Primera, me llevé 22 partidos en los que el equipo no perdía. Todo era color de rosas. En ese sentido, el primer año aquí en el Betis son todos buenos momentos para recordar.
D.M.: Cuando recibiste la llamada de Iñaki Sáez para jugar con la selección, ¿lo esperabas?
J.: No es que no te lo esperes, sino que ya antes de que salgan las listas, te van comentando cosas de que existe la posibilidad de que vayas a ser convocado. La verdad es que, después de estar solo un año en Primera División y venir España de la eliminación del mundial de Corea, con nuevo seleccionador como Iñaki Sáez y que te llamen para la selección, no es que fuese una sorpresa porque se filtraba un poquito que podía ir, pero sí que era para hacérselo mirar. Solo llevaba un año en Primera y ya estaba convocado con la selección, sobre todo después de cómo había sido mi carrera anteriormente, ya que llegué un poquito tarde a la élite en el sentido de que me había llevado mucho tiempo en los filiales tanto del Cádiz como del Betis. Aproveché esa oportunidad y me llegó la llamada de la selección. Es una etapa muy bonita que todo futbolista desea tener, de jugar con la camiseta de su selección.
D.M.: Debutas en la selección contra Hungría en un amistoso, sustituyendo a Marchena en el segundo tiempo. ¿Cómo viviste aquel momento?
J.: Al final vas pensando que te llega ese momento desde pequeño de jugar con la selección, pero luego nada, como un partido más, intentar hacerlo lo mejor posible. Fue un amistoso allí en Hungría por el homenaje a Puskás y la verdad que disfruté de ese momento de debutar con la selección. Sabes que es el sueño que has tenido tú, que han tenido tus familiares desde que has jugado al fútbol.
D.M.: En 2009 pasas al Atlético de Madrid, un equipo en el que estaban figuras como Agüero o Forlán y ganas la Europa League. ¿Cómo fue ganar un título continental?
J.: Fue bonito, sobre todo después de tantos años que llevaba el Atlético sin ganar ese título, que creo que eran cuarenta años. Se consiguió y mira al final lo que se ha creado, con conseguir esos títulos de UEFA y Supercopa. Luego hay un par de años de transición, pero con la llegada al final del 'Cholo' Simeone el equipo cambia la cara. En los últimos tiempos el Atlético de Madrid se ha vuelto a convertir en un grande de España y Europa y creo que los que estuvimos allí generamos un poco esa conciencia.